Tabla de contenidos
ToggleTengo baja autoestima, ¿cómo puedo mejorar mi percepción de mi misma?
La autoestima es la apreciación o valoración que hacemos de nosotros mismos. Es decir, cuánto nos queremos. Es algo que viene determinado por nuestras experiencias y la forma en la que nos hemos relacionado con los demás desde la infancia, condicionando nuestra forma de percibirnos a nosotros mismos y al mundo.
Y es que las personas con autoestima alta también confían más en los demás y en sus propias capacidades a la hora de conseguir las cosas que se proponen en la vida. Y al final, en parte es cierto esto que nos dicen de “cree en ti mismo y lo conseguirás” porque lo cierto es que las personas con alta autoestima tienen más éxito en la vida, simplemente por el hecho de que intentan y se lanzan mucho más al tener menos miedo al rechazo y al fracaso que otra con baja autoestima.
¡Tranquila! Te traigo una buena noticia y es que puedes mejorar tu baja autoestima cambiando la forma que tienes de relacionarte contigo misma y con el mundo. Pero antes, déjame que te explique un poco más sobre qué es la autoestima y por qué está compuesta.
Como te comentaba, la autoestima es cuánto te quieres a ti mismo o a ti misma, es decir, tiene un matiz afectivo o emocional directamente relacionado. Pero para llegar a querernos a nosotros mismos antes tenemos que saber quiénes somos, cómo somos, si valemos o no valemos, cuáles son nuestros defectos y nuestras virtudes… Tiene sentido, ¿no?
¿Qué es la autoestima?
Vamos a desglosarlo en algunos términos, para que lo comprendas:
- Autoconocimiento: Se refiere a la cantidad de información que disponemos sobre nosotros mismos. Cuanto conocemos nuestras cualidades, nuestros defectos, nuestros valores… La información que disponemos sobre lo que nos gusta, sobre lo que no nos gusta, sobre lo que queremos y lo que no queremos en la vida y cómo nos relacionamos con nuestras emociones.
- Autoconcepto: Esta es la dimensión más “mental” y se refiere al “concepto” que tenemos de nosotros mismos. Es decir, “soy bueno/a” o “malo/a”, soy válido/a… Son las etiquetas que nosotros mismos nos ponemos. El autoconcepto, además, es multidimensional ya que abarca muchos campos: autoconcepto físico, autoconcepto académico, autoconcepto social… Así, por ejemplo una persona puede verse muy bien en un terreno laboral y sin embargo verse muy mal en un ámbito físico llegando a la dismorfia corporal o viceversa.
- Autoaceptación: Se trata de cuánto me acepto, una vez que conozco mis defectos y mis virtudes. La autoaceptación no quiere decir que nos veamos perfectos y sin defectos, quiere decir que aceptamos nuestros defectos y que nos apoyamos en nuestras fortalezas. Quiere decir que aunque luchemos por mejorar nuestros defectos, lo haremos siempre desde el amor y no desde el odio hacia nosotros mismos porque aunque no nos guste todo de nosotros, nos apreciamos en conjunto.
- Autorrespeto: Esta es casi la más importante de todas ya que tiene que ver con nuestro diálogo interno o la forma en la que nos hablamos a nosotros mismos al interpretar las cosas que nos pasan. Si cuando nos ocurre algo malo, decimos “soy un desastre, todo me sale mal”, vamos a conseguir que cada vez nuestro autoconcepto y nuestra baja autoestima se vengan más abajo aún. Entonces, ¿qué podemos hacer? Es muy sencillo. Intenta imaginar cómo le hablarías en ese caso a tu mejor amigo/a. Seguro que el mensaje sería mucho más objetivo, compasivo y amable. A partir de ahora, intenta hablarte así a ti mismo/a y empezarás a notar los cambios.
Bueno…Ya hemos visto la parte teórica y ahora… ¡Toca pasar a la práctica! Ahora sí, coge bolígrafo y papel, voy a darte 10 estrategias en psicología para aumentar tu autoestima.
Estrategias para aumentar y mejorar una baja autoestima
Haz una lista de deseos
Haz una lista de cosas que te gustaría hacer y/o que has dejado de hacer por miedo, vergüenza, pereza… Por ejemplo: ir a patinar, aprender a bailar salsa, hacer deporte, llevar ropa más alegre… Empieza a hacer todos los días alguna de las cosas de esa lista, empezando por las más sencillas. Intenta que gran parte de estas actividades, sea sin la compañía de nadie… ¡La dependencia emocional es una de las compañeras principales de la baja autoestima!
Además, incluye en esa lista tus cualidades y de tus logros y mantén esa lista siempre cerca de ti para seguir ampliándola. ¿Cómo nos vamos a valorar si no valoramos todas las cualidades que tenemos y que nos han ayudado a conseguir nuestros objetivos?
Trabajar la autoestima comienza no comparándote
No te compares con nadie. ¡Esto es fundamental! Gran parte de los problemas de baja autoestima que tenemos suceden porque estamos expuestos a un montón de estímulos que sin querer a través de las redes sociales, nuestro cerebro interpreta como señal de alerta: “tú eres peor que esta persona”. Lo primero que puedes hacer es identificar todas las cuentas de Instagram que te hacen sentir así y dejas de seguirlas, así de fácil.
Aunque ese trasero en las maldivas tan perfecto que ves cada mañana cuando te levantas no sea lo más real ni frecuente, ni ese mercedes que conduce el chico del gym al que sigues sea lo más representativo, ¿para qué amargarte viéndolo? Si no te aporta nada, apártalo. Trabaja en ti mism@. No te compares, compárate contigo misma. Has avanzado más de lo que creías en tu vida.
Frases para subir la autoestima
¡Busca un mantra! Un mantra es una frase que nos de paz y nos haga sentir bien y que tenga un significado espiritual para nosotros. Puede ser algo tan sencillo como “Hakuna matata” (vive y sé feliz) o algo más elaborado como “Soy perfecta tal y como soy y no he venido a este mundo a estar a la altura de las expectativas de nadie”. Cuando te sientas mal y tu cerebro te bombardeé con malos pensamientos, cierra los ojos y repítete varias veces este mantra.
Diario de agradecimiento
Te parecerá extraño, quizá lo hacías en tu época más adolescente… Pero créeme que te ayudará. Lleva un diario de agradecimiento e intenta apuntar todos los días algo que te gusta de ti, algo por lo que da las gracias y algo que has hecho bien en el día. Esto te ayudará a centrar tu mente en el presente y en las cosas positivas de tu vida.
Confía en ti misma para aumentar tu baja autoestima ¡Valórate!
Sé honesta contigo misma y con los demás y aprende a comunicar tus preferencias y necesidades emocionales. A veces nos cuesta poner límites porque pensamos que si los ponemos, la gente se alejará de nosotros. Pero, amiga, aquel que se aleje de ti porque pongas límites es que bien se estaba aprovechando de no que no los pusieras y poco merece tu compañía así que más vale que te des cuenta pronto.
Verás como el poner límites te hace ganar confianza en ti misma y darte cuenta de que realmente la gente te quiere y te aprecia por lo que eres y no por todo lo que haces por ellos. ¿No te apetece cenar sushi? Díselo a tu amiga, seguro que encontráis algo que os apetezca a las dos y lo que ella realmente quiere es disfrutar de tu compañía.
Valórate siempre por tu esfuerzo y no por el resultado de tus acciones. Al final, lo primero sí depende de ti pero lo segundo no. Así que se amable contigo mismo y mide tu avance en términos de acciones y no de resultados. Por ejemplo, en lugar de amargarte porque no has conseguido aprobar la oposición este año, valora que estás aprendiendo a memorizar más rápido que nunca y que estás cogiendo un hábito de estudio y una rutina y organización digna de admiración.
Cierra círculos que no te aporten
Rodéate de gente que te sume y que te haga sentir bien y no tengas miedo a soltar y a cerrar círculos. Tan importante es lanzarse a nuevos caminos como saber cerrar otros que ya no nos hacen bien. Quedarse atrapado en situaciones que no nos hacen felices, en relaciones que nos hacen infelices o relaciones tóxicas ni nos hacen sentir completos es una de las mejores formas que tenemos de autoconvencernos de que no merecemos más.
Ponte metas realistas
Ponte metas ambiciosas pero realistas y sé flexible y autocompasiva siempre. Cuando queremos conseguir algo, uno de los peores errores que podemos cometer es ponernos una meta muy ambiciosa y poco realista a corto plazo. Lo que ocurrirá es que al principio empezaremos muy motivados, pero como luego los resultados no serán los esperados, enseguida nos vendremos abajo y nos frustraremos, volviendo a autosabotearnos con el mismo lenguaje de siempre “¿Para qué intento nada si luego el resultado siempre es nefasto?”. Es mejor ir poco a poco y darnos pequeñas recompensas.
El deporte te ayudará
Si nunca has hecho deporte… ¡Empieza ahora! Sé que habrás visto decenas de vídeos en Tiktok sobre cómo el deporte te ayuda a superar rupturas e incluso a quererte y valorarte más. Y es que es así. Está más que demostrado que realizar ejercicio físico entre 3 y 5 días tiene efectos positivos en la salud mental ya que reduce el cortisol (la hormona del estrés) y aumenta las endorfinas (hormona de la felicidad), además de que mejora nuestro autoconcepto físico y nuestra autoestima.
Poco a poco comenzarás a ganar confianza en ti misma y a valorar cada paso que das. ¡Créeme!
Y sobre todo, como te decía… Recuerda hablarte como le hablarías a alguien a quien quieres y respetas mucho muchísimo <3 Mi nombre es Marta Prat, psicóloga en Easydona… Espero que este artículo te haya ayudado. Si necesitas apoyo psicológico o tienes dudas… ¡Siempre podrás escribirnos! Comparte este artículo si te ha gustado y crees que podría ayudar a alguien más.
¿Has pensado en donar óvulos?